EL CORRER DE LOS AÑOS
Cuando los años pasan, destructores,
van absorbiendo el zumo de la vida
hasta dejar la piel reblandecida
y expuesta al escozor de los dolores.
Cuando los años pasan, los clamores
que emergen de la sangre envejecida,
apenas son cual leve sacudida
que brota entre asfixiados estertores.
Cuando los años pasan, van faltandol
as fuerzas, el valor y los empeños;
se debilitan hasta los ensueños,
en tanto que el espíritu se entume
y el cuerpo ¡pobre arcilla! se consume,
hasta quedar exhausto, dormitando...
!CUANDO ME VAYA DE TI!
Cuando me vaya de ti, he de dejarte
una eterna tristeza en la mirada
y una inmensa nostalgia, muy calada,
por mi manera loca de adorarte...
Cuando me vaya de ti, has de quedarte
con una sensación tan desolada
que hasta te hará llorar, y sé que nada
ya te podré decir por consolarte...
¡Pero también te dejaré la gloria
de recordar el tiempo ya vivido
durante años de pasión vehemente!
Mientras me tengas viva en la memoria,
a tu lado estaré. ¡Sólo el olvido
me fundirá en la tierra eternamente!
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